viernes, 27 de marzo de 2015

Superheroes.

Todos somos superheroes. Puede que no  nos pique una diminuta araña un día cualquiera al salir de casa y nos convirtamos en Spiderman; puede que no vengamos del planeta Krypton ni tengamos grandes capacidades, ni super fuerza, ni podamos volar ni seamos Superman; seguramente nunca tendremos un principio trágico que nos haga querer iniciar una gran lucha enmascarada y cuerpo a cuerpo contra el crimen como Batman; jamas seremos nada parecido a Hulk ni mutemos genéticamente y lleguemos a tener una fuerza sobrehumana, ni invulnerabilidad, ni longevidad; probablemente nunca seamos símbolo de libertad y de patriotismo, ni tengamos la valentía del Capitán América; estoy casi convencida de que nunca descubriremos una súper armadura que nos haga ni una milésima parte de lo invencible que es Ironman; nadie podrá darnos nunca un anillo de poder que nos permita brillar con tono esmeralda como Linterna Verde; es inconcebible que de nuestra piel nazcan grandes garras tan increíblemente poderosas como las de Lobezno; no seremos hijos de Odín y Gaea, no poseeremos capacidades físicas como poder levantar millones de toneladas e incluso destruir, satélites, planetas  y estrellas con los golpes de un martillo como Thor; y desde luego no podremos llegar a ser el hombre más rápido del mundo, tener una velocidad como la de la luz y evadir algunas de las leyes de la física como Flash. Pero realmente eso no importa, porque nosotros tenemos la capacidad de ser nosotros, tenemos nuestros propios poderes como pueden ser conseguir hacer reír a una persona, poder hacer llorar a alguien con tan solo una palabra, leer la mente de alguien con una mirada, bailar y cantar sin preocuparnos por nada mas. Esos son los súperpoderes relaes, poder llegar a hacer algo tan vulgar, pero con tanta pasión que se convierta en algo mágico y sea un súperpoder que te convierta en el superheroe mas increíble de todo el universo.